Los padres de Díaz fueron secuestrados el 28 de octubre por personas armadas en Colombia. Las autoridades liberaron a su madre unas horas más tarde, pero todavía retenían a su padre mientras lo buscaban.
Los secuestradores en Colombia liberaron a Luis Díaz Sr., padre del futbolista del Liverpool Luis Díaz, después de retenerlo durante casi dos semanas.
Según informes, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) liberó a Luis Manuel Díaz. Así lo afirma la Asociación Colombiana de Fútbol.
Los medios locales transmitieron imágenes de él viendo a miembros de su familia visiblemente conmovidos cuando llegó a una pista de aterrizaje en un helicóptero.
Los padres de Díaz fueron secuestrados en una gasolinera en Barrancas, un pueblo en la frontera con Colombia y Venezuela, el 28 de octubre por un grupo de hombres armados que viajaban en motocicletas.
Las autoridades pudieron rescatar a Cilenis Marulanda, la madre del futbolista que hoy tiene 26 años, pocas horas después de colocar obstáculos.
Las operaciones aéreas y terrestres realizadas por tropas especiales que buscan en una cadena montañosa compartida por Colombia y Venezuela no han arrojado señales de Díaz.
Los funcionarios indicaron que no podían descartar la posibilidad de que hubiera sido contrabandeado a través de la frontera, lo que hacía imposible que los funcionarios colombianos lo capturaran.
Cualquiera que proporcionara información que ayudara a las autoridades a localizar al rehén tenía derecho a recibir 48.000 dólares (o 39.000 libras esterlinas).
El extremo del Liverpool había suplicado a los secuestradores de su padre que lo liberaran, alegando que él y sus hermanos se encontraban en una situación «desesperada». Su padre ha sido tomado como rehén.
El ELN dio esperanzas al futbolista, a su familia y a otras personas vinculadas al Liverpool FC tras declarar el secuestro como un accidente y ordenar la liberación del jugador.
El domingo, el grupo rebelde anunció que sus planes de entrar en el norte de Colombia habían sido bloqueados debido a la presencia de militares allí y que ya no podía garantizar su seguridad.
Un día después, el ejército colombiano dijo que estaba cambiando su postura para facilitar la liberación.
Ese secuestro «nunca debería haber ocurrido», como dicen.
Mientras celebraban el regreso sano y salvo del Sr. Díaz, quienes participaron en las negociaciones de paz con el ELN enfatizaron que su secuestro «nunca debería haber ocurrido».
El comunicado continuó exigiendo al ELN la liberación inmediata de todos los rehenes; sin embargo, no mencionó cuántas personas seguían detenidas por la organización.
Después de que se aseguró la liberación del Sr. Díaz, la Asociación Colombiana de Fútbol agradeció públicamente al gobierno colombiano, los militares, las autoridades y todos los involucrados. Continuaron afirmando que “detrás de una pelota ruedan los sueños e ilusiones de niños y niñas, jóvenes, mujeres, hombres y futbolistas adultos, y sus seres queridos”.
«El fútbol es la búsqueda silenciosa de un interés. Que nunca haya otro indicio de que alguien podría intentar atacar esa verdad.
Este fue un comentario del presidente de Colombia, Gustavo Petro: «Viva la libertad y la paz».
Díaz anotó el empate tardío para el Liverpool el domingo contra Luton Town, salvando un punto para los Rojos y evitando una derrota inesperada. Su gol marcó la diferencia en el empate 1-1 del Liverpool con Nueva York.
Con alegría, reveló la camiseta blanca debajo de la cual estaban impresas las palabras «Libertad para papá» (traducida aproximadamente como «libertad para mi padre»).
Las conversaciones de paz entre el gobierno colombiano y el ELN, que habían comenzado el año anterior para poner fin a un conflicto de 60 años que se había cobrado la vida de al menos 450.000 personas, se vieron interrumpidas por la detención del padre de Díaz.